La calidad del aire interior en edificios y establecimientos es esencial para las personas que se encuentran en ellos. Las contrucciones El aumento de la estanqueidad en las contruscciones vcada vez perjudica más la calidad del aire interior teniendo como resultado una elevada concentración de contaminantes. Los seres humanos somos sensibles a los efectos olfativos e irritantes de cerca de compuestos químicos presentes en el aire. Esto provoca cambios en el estado de salud, manifestándose en síntomas agudos o incluso crónicos.

Una de principales causas que provocan ésta contaminación es la ventilación insuficiente debida a falta de mantenimiento, distribución deficiente y entrada insuficiente de aire fresco.

La forma más habitual de renovar el aire de un espacio es por medio de la extracción de aire, normalmente se ha considera que la razón principal de hacerlo así es porque se crean muchas menos corrientes de aire y menos molestias para las personas dentro de estos espacios. Los extractores de aire se asocian a un sistema de renovación que consiste en la aspiración del aire contaminado del interior de un espacio cerrado, pero no nos dice nada del aire fresco de reemplazo, evidentemente para que la extracción sea la esperada, deben de existir entradas de aire para sustituir el aire extraído.

Los extractores, pueden ser de dos tipos fundamentales en función del flujo que se produce en los mismos:

Extractores con ventilador de tipo axial : el flujo de aire pasa por el ventilador de forma paralela a su eje. No cambian el sentido del flujo del aire.

Extractores con ventilador de tipo centrífugo o radial : el flujo de aire sale de forma perpendicular al flujo de entrada.

Los beneficios y aplicaciones para los extractores tipo hongo son muy variadas, desde su instalación en techos para extracción de aire limpio en: